UN MONOLITO RECUERDA A BIENVENIDO CHAMORRO, ALCALDE SOCIALISTA FUSILADO

“La muerte de una sola persona defendiendo la Libertad nos concierne a todos. La defensa de la Libertad es cosa de todos, porque la Libertad es causa común de toda la ciudadanía”. Con esta palabras, el alcalde de Sanlúcar, Víctor Mora, inició su intervención en el acto de recuerdo y homenaje a Bienvenido Chamorro Merino -Martos (Jaén), 1890 - Sanlúcar de Barrameda 19.08.1936- que ha tenido lugar hoy en el Castillo de Santiago, donde se ha descubierto un monolito en el que se honra su memoria. Se cumple así una moción aprobada en el Pleno del Ayuntamiento de Sanlúcar.

Bienvenido Chamorro, alcalde socialista en julio de 1936, fue secuestrado y fusilado apenas un mes después del levantamiento militar. El alcalde ha subrayado que al honrar la memoria de quien fue también fundador de la agrupación socialista de Sanlúcar “honramos asimismo la memoria de tantos paisanos nuestros, contemporáneos de Bienvenido, que sufrieron persecución e incluso muerte por sus ideas, por su compromiso con la Libertad, la Justicia social y la Democracia”.

El alcalde recordó que Sanlúcar, como tantas otras ciudades andaluzas y españolas, sufrió la represión fascista que llevó a la muerte a decenas de nuestros conciudadanos entre 1936 y 1939, unas muertes que fueron seguidas por el exilio exterior e interior de tantas personas que tuvieron que marcharse o vivir silenciando sus ideales durante las largas y oscuras décadas de la dictadura franquista, hasta la llegada de la Democracia.

           

“Nuestra ciudad es consciente de que la Libertad se defiende cada día, de que es necesario el compromiso de todos con la Democracia para que nuestro sistema de libertades pueda seguir vigente. Es responsabilidad de todos que nuestra sociedad no caiga en la trampa del olvido, y que se mantenga viva la Memoria de quienes lucharon e incluso dieron su vida porque el mundo fuera mejor, porque todos seamos libres”, dijo Mora, señalando que, desde las filas de los colectivos promemoria histórica, así como desde la administración pública local, se ha venido trabajando por la recuperación de la Memoria democrática, por la Memoria y la Dignidad de tantas personas “perseguidas, secuestradas, asesinadas, silenciadas por la dictadura”.

Bienvenido Chamorro Merino, nacido en Martos (provincia de Jaén), vecino de Sanlúcar, fue alcalde de Sanlúcar, regentó un comercio de ultramarinos en la calle Ancha de Sanlúcar de Barrameda, y en junio del año 1930 participó en la constitución de la Agrupación Socialista de Sanlúcar como vocal de su Comité Directivo.

Comprometido con la ciudad, con la acción social y con la defensa de lo público, sería elegido concejal del Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda en las elecciones municipales del 14 de abril de 1931 que trajeron la II República, siendo cuarto teniente de alcalde.

 Y en la Corporación constituida tras las elecciones locales de febrero de 1936, Bienvenido Chamorro sería elegido alcalde de Sanlúcar, quedando al frente de la alcaldía hasta que el golpe de Estado de julio de ese año acabó con dicha Corporación, con la normalidad democrática en España y con la vida de muchos sanluqueños. El alcalde fue secuestrado el día 22 de julio de 1936 por los golpistas, siendo asesinado el 19 de agosto de dicho aciago año.

“Bienvenido Chamorro era la máxima autoridad democrática de nuestra ciudad, el representante del Pueblo, de la soberanía popular, de la Constitución y de la pacífica y libre convivencia que la Democracia contiene y necesita. Por eso, como ya hemos hecho con las decenas de sanluqueños que fueron asesinados por sus ideales, hoy queremos honrar la memoria de quien fuera el representante de la soberanía y del Pueblo en nuestra ciudad”, dijo Mora.

“Hoy queremos erigir este monumento como reconocimiento a su memoria, a su sangre derramada por las libertades, a su compromiso con la Democracia y con su ciudad, Sanlúcar de Barrameda”, finalizó.

El alcalde y Manuel Rodríguez en representación del Foro de Memoria Democrática de Sanlúcar, han sido los encargados de descubrir el azulejo.