Reunión de Sí Se Puede con la Cofradía de Pescadores

El pasado 14 de julio los concejales de Por Sanlúcar Sí Se Puede, Manuel Comesaña
y David Alhambra, se reunieron con los representantes de la Cofradía de
Pescadores de Sanlúcar, para conocer la situación del sector, los proyectos, y
también los problemas que afectan a este colectivo.
En la reunión, la Cofradía de Pescadores expuso que su principal problema en la
actualidad es su relación con la Agencia Pública Puertos de Andalucía, la entidad
pública que gestiona el muelle de Bonanza.
Demandas como el reforzamiento de las defensas para los atraques del muelle son
insistentes y provocan daños a los barcos con los costes en reparaciones que afecta
a la flota. Las naves que tienen en alquiler la cofradía esta sin aire acondicionado
porque los aparatos se encuentran averiados, los cuartos para guardar las redes son
de alquileres muy altos, pequeños e inservibles para la flota, y cuando están en
parada biológica les siguen cobrando el canon de alquiler, lo que supone un coste
extra cuando no pueden desarrollar su actividad. El muelle dispone de una serie de
naves que podían ser utilizadas para la transformación y elaboración del producto,
pero los costes de alquiler son altísimos; por lo que la Cofradía pide la bajada del
coste de alquiler para que las empresas recalen en la zona y generen empleo. En
resumen, se traslado una falta de atención al sector ante las demandas y las
necesidades para mejorar el día a día en el puerto de Bonanza.
Con respecto a las ayudas que destina Europa, la actual normativa y los requisitos
establecidos por las distintas administraciones (Desde Europa hasta la Junta de Andalucía) hacen que ningún barco, armador, ni marinero soliciten esas ayudas ya
que suponen un lastre, y las que se pueden solicitar exigen requisitos que no se
adecuan a la realidad laboral de los pescadores.
Los concejales de Sí Se Puede se comprometieron a informar a las diputadas
autonómicas que se reunirán en la Comisión de Fomento para que se busquen las
soluciones oportunas para que los pescadores puedan desarrollar su actividad con
las garantías adecuadas y con los servicios pertinentes, además de eliminar las
trabas económicas que los marginan.