INAUGURADAS LAS NUEVAS INSTALACIONES DE LA COOPERATIVA VIRGEN DEL ROCÍO DE LA ALGAIDA

El alcalde de Sanlúcar, Víctor Mora (PSOE), y Juan Manuel Jiménez, presidente del consejo rector de la cooperativa Virgen del Rocío de La Algaida, inauguraron la noche del pasado sábado las nuevas instalaciones de esta firma agrícola sanluqueña, en un acto que reunió a cerca de un millar de personas. El primer teniente de alcalde, Javier Porrúa (Cs), y el delegado de Agricultura, Rafael Louza (PSOE), junto a representantes de otras empresas agropecuarias y de colectivos de la ciudad también participaron en la apertura de este centro de manipulación.

El presidente de la cooperativa mostró su satisfacción por este gran momento. “Hace muchos años que teníamos necesidad de ampliar las instalaciones y ha llegado el día. Es un proyecto que iniciamos hace tres años en firme y que hoy se hace realidad. Es un placer está junto a todos los socios y poderles mostrarles todas las instalaciones”, dijo Jiménez.

El alcalde, por su parte, subrayó que “es un día fundamental para la cooperativa y para la ciudad. Se pone fin a un trabajo que veníamos realizando con ellos, porque era muy necesario, y supone no solo una ampliación de instalaciones, sino de contrataciones y de ventas y que la marca Arenas Finas este por todo el mundo. Estoy muy satisfecho por la labor que realizan y saben que tienen la mano tendida para seguir trabajando con ellos”, agregó.  

Virgen del Rocío SCA cuenta con un nuevo centro de manipulación de más de 2.500 m2 para el envasado del boniato, un un tubérculo cada vez más demandado en Europa Central como sustituto de la patata, y del que La Algaida es uno de los principales centros de producción de la provincia, donde se encuentran la mitad de las dos mil hectáreas de este cultivo que hay en Cádiz.

Junto a  la cooperativa Frusana SCA, Virgen del Rocío SCA cultiva cada campaña 1000 Has de boniato, con una producción final de 40.000 Tn

El boniato, aparte del aumento de oportunidades comerciales, es un cultivo que conlleva otras grandes ventajas para las industrias manipuladoras y comercializadoras. Es un cultivo de primavera/verano que es compatible con otras hortalizas, ya que se complementan en el tiempo, de manera que estas industrias pueden trabajar prácticamente durante todo el año, lo que provoca que el empleo pase de ser temporal a indefinido, obteniéndose empleos de calidad y duraderos.

Desde el punto de vista de empleo, una hectárea de boniato necesita en su producción de 120 jornales directos lo que supone 120.000 jornales en Sanlúcar con un costo de entorno a 1.000.000 €.

Además, en la industria, la manipulación, envasado y comercialización dura unos 90 días, desde septiembre a finales de noviembre, necesitándose en cada cooperativa un total de 250 jornadas de trabajo de 8 horas cada una, con un coste de 1.200.000 en total. A ello hay que añadir los puestos de trabajo indirectos que implica: Venta de semillas, abonos, fitosanitarios, transporte etc.